Es tiempo de disfrutar del verano y de sus días de tanto calor, pero debemos extremar las precauciones para no sufrir una deshidratación.
¿Sabías que el 80% de nuestro cuerpo está compuesto por agua?
- Los músculos de 75% agua
- La sangre de 92% agua
- El cerebro de 75% agua
- Los huesos de 22% agua
Por esta razón, para sentirnos saludables necesitamos estar bien hidratados.
¿Cómo podemos lograrlo?
- No esperes a tener sed para hidratarte: Consumí al menos 3 litros de agua diarios.
- Ingerí alimentos frescos y con alto contenido de agua, tales como frutas y verduras.
- Tomá agua antes y después de realizar actividad física, de manera gradual y pausada.
- Evitá las bebidas azucaradas o alcohólicas.
- Llevá con vos siempre una botella de 1/2 litro. Esto te ayudará a tener un control de la cantidad de litros ingeridos.
- Los niños y ancianos son los principals grupos de riesgos expuestos a una deshidratación, ofreceles agua a menudo.
Recordá que los mareos, las náuseas y la sed son los primeros síntomas que se presentan ante una deshidratación.
Somos agua…. ¡Hidrátate!